Según la ley, el trámite de homologación de títulos no debería tardar más de 6 meses. Las organizaciones reclaman que hay hasta 3 años de demora, y denuncian un «abuso burocrático”.
“En España hay un atraso de 100 mil expedientes de solicitudes de homologaciones y equivalencias. El proceso está demorando, en la mayoría de los casos, entre 2 y 3 años”, explica Rami Ahmadi, una pediatra de origen iraní, referente de la asociación “Manifestación por la Homologación Justa”.
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En diálogo con InfoCivitano.com, Ahmadi repasó el cuadro general de la problemática. “Hay un atraso de, aproximadamente 100 mil expedientes solicitudes de homologación y equivalencia. Hace ya tiempo que el Ministerio de Universidades no logra gestionar los expedientes de forma que cumpla con las leyes que hay al respecto”, sostiene la dirigente, en referencia a los reales decretos de 2014 y 2022, que establecen que las solicitudes de homologación y equivalencias se deben resolver en un plazo de 6 meses.
Un sistema de homologación que no funciona
Según la médica, el proceso actualmente está demorando en la mayoría de los casos entre 2 y 3 años. Desde la organización indican que estos tiempos no solo incumplen con la ley española, sino también con las recomendaciones de la Comisión Europea en relación al reconocimiento de títulos de terceros países.
Las causas del problema
Para Ahmadi, la problemática tiene tres causas principales: falta de personal, un sistema ineficaz y falta de voluntad política.
En primer lugar, la falta de personal estatal dedicado a gestionar estos expedientes, que no solo demora los trámites sino también que genera un gran déficit de comunicación con los interesados. “Son años de espera y de silencio administrativo durante el cual no se sabe el estado del expediente, no se sabe nada”, explica. También reclaman que toma “en promedio dos años hasta que se recibe la notificación que el expediente ha sido recibido por el Ministerio”.
En segundo lugar, las organizaciones señalan que “el sistema de tramitación es muy ineficiente” y que “se pierde mucho tiempo pidiendo los mismos documentos que ya han sido presentados”. “Es un gran problema cuando te notifican que el expediente está incompleto. Son por lo menos 6 meses que demora recibir una notificación, y cuando ya está subsanado otros seis meses para que te den alguna otra noticia” relata la dirigente.
“El fondo de todo esto es la falta de voluntad de acabar con el atasco”, denuncia Ahmadi.
Un reclamo que crece
Cuando Rami llegó a España y supo del problema de demoras en las homologaciones, quedó impactada. Aún así, acomodó su vida y sus recursos para poder enfrentar ese tiempo de espera. Pero cuando pasaron los tres años sin resolución a su expediente decidió hacer algo. “Cuando pasaron los 3 años ya, dije que ya era demasiado y sentí como si había llegado al punto de abuso burocrático y ante eso yo no podía quedarme callada”.
“En septiembre difundí por facebook y whatsapp, una carta de invitación a manifestarnos, dirigida a las personas que estaban en la misma situación. Así surgió un grupo de facebook”, indica la médica. “Tuve una tremenda respuesta y de pronto teníamos mil personas en el grupo de whatsapp”, relata, y agregó: “Cuando hice la invitación y poquito a poco se juntaron otras personas en la misma situación es cuando me dí cuenta de cuántos somos de verdad”.
Al mes siguiente, el grupo realizó las primeras manifestaciones en cuatro ciudades de España: Madrid, Barcelona, Valencia y Málaga); y poco a poco fue avanzando en su organización. Ahora estan activos en 10 ciudades, ya que sumaron Bilbao, La Coruña, Canarias, Sevilla y Mallorca.
Rami es doctora, pero en la organización hay personas de diferentes profesiones. “Somos multisectorial y representamos todas las profesiones y personas de más de 25 países, incluyendo España y países europeos”, explica. Actualmente la problemática afecta a médicos, odontólogos, enfermeros, terapeutas, dietistas, psicólogos o ingenieros por igual.
Presión al Ministerio
“Queremos crear conciencia de la problemática y poner presión en el Ministerio de Universidades. Que hagan lo que sea necesario para resolver el problema y el atasco y que cumplan con la ley”, recama Rami. En el último tiempo, la asociación tuvo dos reuniones con el Ministerio de Universidades y su Secretario General José Manuel Pingarón, responsable del área de homologaciones. “Nos han reconocido como el grupo representante de los homologantes”, comenta la dirigente.
En las últimas semanas, diversos medios de comunicación en España se hicieron eco de esta problemática y del crecimiento del reclamo, que ya llevó a los homologación a entablar reuniones con delegaciones del gobierno en muchas comunidades autónomas y políticos de varios partidos. “Esperamos lograr un proceso de homologación y equivalencia que cumpla con la ley y que sea acorde con las recomendaciones de la Unión Europea”, reclaman.
En diálogo con InfoCivitano, fuentes vinculadas al Ministerio afirman que cada mes entran entre 4 mil y 5 mil expedientes nuevos de homologación de título al Ministerio. “Hemos contratado a más agentes, hay una gran afluencia de profesionales a España y estamos buscando la forma de agilizar el proceso”, afirmó un director que prefirió no ser mencionado.
En declaraciones a la prensa, la Ministra de Ciencia, Innovación y Universidades afirmó que “su departamento está preparando un plan de choque para agilizar esos expedientes”. Según trascendió a la prensa, las medidas que se tomaron desde el Ministerio incluyen sumar 26 agentes al área de homologaciones, y se implementó un procedimiento de atención personalizada al ciudadano para quienes tengan sus expedientes incompletos, que serían más de 25 mil casos.
También se estaría desarrollando un plan urgente de digitalización del Ministerio, y un licitación para realizar un servicio de revisión de los expedientes por medio de Inteligencia Artificial. El Ministerio comunicó también que priorizarán a las personas que estén residiendo legalmente en España, algo que no tiene el apoyo de los homologación por considerarlo “un trato desigual ante la ley para quienes están residiendo fuera del territorio Español.
Desde el organismo gubernamental afirmaron a la prensa que duplicarán las gestiones para pasar de los 9 mil expedientes favorables que vienen resolviéndose por año, para llegar a 18 mil resoluciones por año en promedio.
Hace casi cinco años que espero la resolución definitiva de mis títulos de enfermero, mi pareja (también enfermera con ocho años de estudios universitarios) hace casi un año (habiendo presentado la documentación por vía telemática). Mi expediente se resolvió luego de tres largos años como «positivo condicionado» y me piden dar un año de prácticas en una universidad española (cuento con nueve años de experiencia en UCI en Argentina). Dado que me desempeño como auxiliar de enfermería en la Comunidad Valenciana, ni mi nómina ni mi tiempo libre me permitirían apuntarme en una universidad para rendir las prácticas que me piden. Todo esto nos acarrea un nivel de estrés, ansiedad y frustración que al Ministerio de Universidades no tiene en cuenta ni le importa. Somos españoles nacidos en el extranjero y no solo que nos discriminan, sino que el sistema aprovecha para rebajarnos como profesionales y como personas. Esta burocracia debería ser castigada, pero personalmente escribí al presidente en dos oportunidades y, claro está, se lava las manos.